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Punta de Tralca (Lunes, 11-04-2011, Gaudium Press) El pasado viernes, la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) hizo público el mensaje conclusivo de la 101° Asamblea Plenaria de Obispos que se desarrolló entre los días 4 y 8 de abril en la casa de Retiros Punta de Tralca. El documento, dirigido a todos los fieles y hombres de buena voluntad, representa una verdadera respuesta del episcopado ante los difíciles sucesos que han afectado a la Iglesia durante el último tiempo.
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| Obispos de Chile |
En conferencia de prensa pronunciada por el Arzobispo de Santiago y Presidente de la CECh, monseñor Ricardo Ezzati,los pastores expresaron su «profundo dolor por los casos pasados y recientes de abusos de menores y jóvenes, cometidos por miembros del clero y personas consagradas. Reconocemos que no siempre hemos reaccionado con prontitud y eficacia ante las denuncias».
Y agregaron: «Manifestamos nuestra cercanía y solidaridad con las víctimas de estos abusos y con sus familias, y hacemos nuestros sus sufrimientos. Les ofrecemos humildemente nuestra petición de perdón, el apoyo que podamos darles, además de nuestra oración».
Citando al Papa Benedicto XVI, en su Carta a los Católicos de Irlanda, los obispos enfatizaron que «la justicia de Dios nos llama a dar cuenta de nuestras acciones sin ocultar nada. Admitan abiertamente su culpa, sométanse a las exigencias de la justicia, pero no desesperen de la misericordia de Dios».
«Hemos reflexionado acerca del crítico escenario que vive nuestra Iglesia (…). Nos duele y preocupa que otros consagrados estén siendo involucrados en presuntos abusos a menores, un pecado abominable para la conciencia cristiana. De un modo especial nos estremece el impacto que, con toda razón, estas situaciones producen en nuestras comunidades y en la opinión pública» dijeron.
Transparencia, verdad y justicia
Con el fin de enfrentar y prevenir estas situaciones, los prelados anunciaron importantes medidas, entre ellas, la reformulación del Protocolo para denunciar abusos el que se dará a conocerdurante las próximas semanas .
Además, se establecerá un organismo dependiente de la Conferencia Episcopal, el cual «oriente y dirija nuestras políticas de prevención de abusos sexuales y ayude a las víctimas».
Otras de las importantes medidas contenidas en el mensaje es el ofrecimiento de «atención psicológica y espiritual que se le ofrecerá a las víctimas de abusos sexuales». También se implementaráun programa de prevención que «capacite a agentes pastorales para responder ante signos de abusos de un menor o joven y que genere ambientes sanos y seguros para todos».
Santidad de vida y misión
Junto con reconocer la verdad de los hechos, reclamar la debida justicia por ellos y reiterar su perdón, los obispos concluyen -a la luz del Concilio Vaticano II- que la Iglesia «encierra en su propio seno a pecadores, y siendo al mismo tiempo santa y siempre necesitada de purificación, avanza continuamente por la senda de la penitencia y de la renovación» (Lumen Gentium, 8)
«Confiamos que por medio de esta dolorosa experiencia de purificación y conversión, el Señor fortalezca el servicio que la Iglesia está llamada a ofrecer al Pueblo de Dios y a la sociedad chilena. Nos encomendamos a la protección maternal de la Virgen del Carmen, Madre de Chile e imagen de nuestra Iglesia», concluyeron su mensaje.
Gaudium Press / Igor Roco
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