Menú 
Beirut (Miércoles, 28-09-2011, Gaudium Press) Convocada por el patriarca maronita del Líbano, Mons. Beshara Boutros Rai, se realizó ayer en la sede del Gran Muftí sunita del Líbano, el jeque Muhammad Rashid Qabbani, una cumbre islámico-cristiana sobre la difícil situación que atraviesa Siria. La cumbre era la continuación de un encuentro precedente, habido en Bkerke, sede del patriarcado maronita, el 16 de mayo de 2011.
Había confirmado su participación en la cumbre el jeque Ahmad Hassoun, Gran Muftí de Siria, quien finalmente no asistió. De ese país del medio-oriente solo se hizo presente Mons. Gregorio III Laham, patriarca greco-melquita católico.
En este encuentro se abordaron las declaraciones emitidas por Mons. Beshara Boutros Rai, en su reciente viaje a Francia, en las que manifestaba su temor de que en caso de que caiga el actual régimen sirio el poder vaya a parar a manos de movimientos extremistas islámicos, con el consecuente peligro de la supervivencia de la comunidad cristiana.
El encuentro islámico-católico, que se prolongó por espacio de 3 horas, abordó también el tema del desarme del movimiento libanés Hezbollah.
De la cumbre fue expedido un comunicado final, que advierte sobre el peligro de que los actuales movimientos oposicionistas del régimen deriven en facciones fundamentalistas; el comunicado afirma que «la presencia de los cristianos en el Medio Oriente es una presencia histórica y auténtica, y su rol en las diferentes naciones es fundamental y necesario», y concluye diciendo que «toda injerencia externa en los asuntos internos de los Países de la región deben ser prohibida, así como cualquier tipo de opresión y violencia».
Con información de Asia News
Deje su Comentario