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El Papa confió Benín a Nuestra Señora de la Misericordia

Ciudad del Vaticano (Lunes, 21-11-2011, Gaudium Press) La primera etapa del segundo viaje del Santo Padre a África -el pasado viernes- fue la catedral beninés de Cotonou, dedicada a Nuestra Señora de la Misericordia, un momento mariano siempre presente en los viajes internacionales de Benedicto XVI. El tema de la breve oración fue dedicado a la misericordia infinita de Dios. En la Catedral se encuentran las tumbas de los precedentes arzobispos de Cotonou: Mons. Christophe Adimou (de 1971 a 1990) y Mons. Isidore de Sousa (de 1990 a 1999).

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El Papa a su llegada a la Catedral

«La misericordia divina no consiste solo en la remisión de nuestros pecados, sino también en el hecho de Dios, nuestro Padre, reconducirnos -a veces con sufrimiento, aflicción y temor de nuestra parte- al camino de la verdad y la luz, porque no quiere que nos perdamos», recordó el Papa dando como ejemplo del «máximo nivel» a la Virgen María. En el primer día del viaje a Benín, por causa del largo vuelo de seis horas, no fueron previstos muchos encuentros.

En un breve discurso Benedicto XVI ofreció una lección de mariología. Con su «sí» al llamado de Dios -observó el Papa- Ella contribuyó para la manifestación del amor divino entre los hombres». Ella no es solo «un modelo de perfección, sino también una ayuda para realizar la comunión con Dios y con nuestros hermanos y hermanas», es «una guía segura para los discípulos de su Hijo que quieren estar al servicio de la justicia, la reconciliación y la paz». El Papa concluyó su discurso con una oración mariana invocando a la Virgen María con los títulos de «Madre de Misericordia», «Reina de la esperanza», «Reina de la paz», «Reina de la justicia» y «Nuestra Señora del África».

El Santo Padre llegó a la catedral de Nuestra Señora de la Misericordia en un auto panorámico después de haber dado una larga vuelta por la ciudad pasando delante de la sede de la Conferencia Episcopal de Benín y atravesando los lados de la capital utilizando los dos puentes sobre el canal entre la Laguna Nokoué y el Océano Atlántico. El programa de la visita a la catedral comprendió el canto del «Te Deum», un breve discurso del Santo Padre, la oración del «Padre Nuestro» y el canto de «Salve Reina».

2011-11-19T080642Z_1712236_GM1E7BJ18UV01_RTRMADP_3_POPE.jpgLa catedral de Nuestra Señora de la Misericordia está situada en el centro de un barrio residencial de la ciudad próximo al «Ancien Port». Fue construida en 1901 y puede contener aproximadamente 800 personas. Se caracteriza por un aspecto inconfundible de rayas de color vino y blancas. Cotonou -que en lengua fon significa «en el lago de los muertos»- se encuentra en la parte sur oriental del país, entre el Océano Atlántico y el lago Nokoué (departamento de Littoral). Según estimativas de 2010 tiene casi 800 mil habitantes y por eso es la ciudad más poblada de Benín. Es considerada la «capital» económica y política del país a pesar de que la capital oficial es Porto-Novo.

La visita del Santo Padre a Benín, que ocurrió también por ocasión del 150º aniversario de la evangelización del país, incluyó la veneración a grandes y decisivas figuras de la Iglesia Católica en el país: Mons. Isidore de Souza y el Card. Bernardin Gantin. Mons. Isidore de Souza fue arzobispo de Cotonou y uno de los protagonistas indudables en el proceso de democratización de Benín al inicio de los años Noventa. Provenía de una familia con profundas raíces en la historia del país a partir del mercado de esclavos. Era también de origen brasileño por el hecho de ser descendiente de Francisco Felix de Souza, un brasileño que vivió en el entonces Daomé en el siglo XVIII y que se volvió vice-rey de Ouidah (otra etapa del viaje apostólico de Benedicto XVI a Benín) por el Rey Guezo, su amigo y aliado. El año pasado nació la fundación que trae el nombre del arzobispo de Souza, que tiene por objetivo la promoción de los valores civiles, éticos y morales; y de una cultura de paz que envuelve principalmente a los jóvenes.

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El Papa celebra la eucaristía en la catedral de Cotonou

La arquidiócesis de Cotonou es guiada por Mons. Antoine Ganyé. Fue erigida en 1955, comprende los territorios de los departamentos de Atlántico y Litoral y la sede arzobispal es la ciudad de Cotonou. El territorio es subdividido en 42 parroquias.

 

 

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