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Medellín (Lunes, 23-04-2012, Gaudium Press) «Familia, custodia de fe», fue el tema que Mons. Juan Vicente Córdoba, Secretario General de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), y presidente de la recién creada Comisión de Bioética de la CEC y Obispo de Fontibón, expuso durante su participación el pasado domingo 22 de abril en el 1o Congreso Pro-Vida para Católicos, organizado por el movimiento «Lazos de Amor Mariano», en Medellín, Colombia.
Durante su conferencia, que tuvo gran acogida de parte de las 3 mil personas que se reunieron para el evento en el colegio Palermo de San José de la ciudad colombiana, el prelado apeló para que se haga «de la familia una página del Evangelio en nuestro tiempo».
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Mons. Córdoba durante su exposición |
Desarrollando la temática propuesta, Mons. Córdoba ofreció algunas reflexiones abordando dos aspectos: la «Iglesia, familia de Dios» y la «Familia, pequeña Iglesia». Donde distinguió que la Iglesia es quien anuncia el Evangelio del matrimonio y la familia, y que la Iglesia, en la actualidad «tiene la necesidad de la evangelización del Matrimonio». Sobre el segundo aspecto, enfatizó que la familia, fundada en el matrimonio, «es insustituible», porque nace de la «voluntad salvífica de Dios».
El prelado también abordó el tema de la familia como gestora de vida, recordando que ella es el «espacio privilegiado para la educación y la trasmisión de la fe», es «formadora de la ética y moral cristiana, constructora de la comunión (…), discípula misionera, levadura en la cultura y en las estructuras sociales y trasmisora de los valores cívicos».
La espiritualidad de la familia
Un especial interés generó en los asistentes al Congreso el tema de la «espiritualidad de la familia» expuesto por el Obispo. Señaló que dicha espiritualidad se desarrolla con 5 elementos: en la plenitud de la vida cristiana ; por medio de la oración, recordando que la «familia que reza unida, permanece unida»; a través de la Palabra de Dios; de la vida sacramental, expresando que «una familia debe nutrirse de los sacramentos»; y permaneciendo en la gracia de Dios.
Por otra parte, refiriéndose al matrimonio, Mons. Córdoba dijo que el amor entre el hombre y la mujer «ha de ser fiel y fecundo», añadinedo que los esposos están llamados a vivir su entrega de amor con toda la generosidad y con toda la alegria»; y recordando que el amor del matrimonio es «dar todo sin esperar nada más».
Dijo, además que los esposos «son ‘sacramento’ «, porque son presencia viva de Dios, y que la propuesta que Dios hace a los esposos es la de llegar a la santidad, donde la Iglesia acompaña en ese camino.
El Obispo también también resolvió algunas inquietudes referentes a la vida y el lugar de los laicos en su defensa durante un foro realizado durante el Congreso.
Gaudium Press / Sonia Trujillo
(Enviada especial, Medellín)
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