Obispos bolivianos llamaron a promover la vida humana

Cochabamba (Miércoles, 25-04-2012, Gaudium Press) «El Sí de Dios a la vida celebrado en la Pascua, nos anima y fortalece para luchar por la defensa de una vida en plenitud, desde su concepción hasta la muerte natural. Por eso la Iglesia rechaza firmemente las leyes que se oponen a la vida que nace del amor de Dios»; expresaron los Obispos de Bolivia en el «Mensaje al Pueblo de Dios» al concluir la 93º Asamblea Episcopal de la Iglesia Católica en el país, en el cual hacen un fuerte llamado a fieles, personas de buena voluntad y a todos los ciudadanos en general a ser «promotores de la vida».

En el mensaje, presentado ayer en rueda de prensa por el Cardenal Julio Terrazas, Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), los obispos manifestaron su preocupación por proyectos que se están elaborando y se refieren a los llamados «derechos sexuales y reproductivos», señalando: «En muchos casos, la promoción de estos supuestos derechos esconde intenciones contrarias al reconocimiento del auténtico derecho a la vida y sostiene la difusión de contraceptivos y del aborto».

El Cardenal Terrazas, en nombre de los Obispos Bolivianos, exhortó a los jóvenes para que sean «constructores de vida y esperanza en una sociedad más junta y fraterna»

Igualmente, expresaron que ven como contradictorio la presentación de un proyecto de ley que busca equiparar la unión de personas del mismo sexo con el matrimonio: «Nadie debe ser discriminado en sus derechos ciudadanos, sin embargo la institución social del matrimonio debe ser tutelada y promovida por las leyes, como está definido en la Constitución Política del Estado».

Sobre lo cual también agregaron y recuerdan que para los cristianos «el matrimonio, por su propia naturaleza heterosexual, es una institución querida por Dios y amparada por su ley. El matrimonio, engendrado y educado a sus hijos, contribuyendo al crecimiento y estabilidad de la sociedad, característica que no tiene ninguna otra unión».

Continuando con el tema de la promoción de la vida, los Obispos Bolivianos también se refirieron al narcotráfico y la drogadicción, especialmente en los jóvenes: «Entre los problemas sangrantes que atentan contra la vida y los valores humanos de la sociedad, destacamos el flagelo del narcotráfico y de la consecuente drogadicción. Son muchos los jóvenes, adolescentes y hasta niños que se han convertido en consumidores de la droga, y muchas las familias que se ven afectadas por esta desgracia que no podemos ocultar ni callar».

Señalaron, además, que esta realidad es «negación de la Pascua», que requiere de la atención de todos, así como respuestas urgentes de parte de toda la sociedad, pero particularmente de las autoridades del país.

Los Obispos también denunciaron fuertemente la degradación social del país, que, como expresaron, es manifestación de la pérdida de valores: «No podemos menos de hacer referencia a la situación de deterioro social que nos envuelve: violencia, conflictos, bloqueos y miedo, que denotan una pérdida de valores espirituales y humanos, de principios éticos y morales, que han sido y son parte de nuestra identidad cultural y de nuestra historia. Constatamos la permanente degradación de la convivencia pacífica entre las comunidades y los pueblos y la devaluación del respeto por el diferente, de la solidaridad, del sentido comunitario y del valor sagrado de la familia».

Concluyendo el mensaje, los Obispos exhortaron a todos los bolivianos, especialmente a los jóvenes, para que sean «constructores de vida y esperanza en una sociedad más junta y fraterna».

Con información de Iglesia Viva -Sistema de Información de la Iglesia Católica en Bolivia.