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São Paulo (Miércoles, 13-05-2009, Gaudium Press) En una etapa más de su gira por Oriente Medio, el Papa Benedicto XVI llegó en la mañana de este miércoles a Belén, ciudad donde habría nacido Jesús, en Cisjordania. Ya en el aeropuerto, fue recibido con una ceremonia de bienvenida de la cual participaron el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmoud Abbas, autoridades políticas y líderes religiosos.
En la plaza delante del Palacio Presidencial de Belén, ciudad mayoritariamente musulmana, pero que abarca una de las mayores comunidades de cristianos palestinos, Benedicto XVI agradeció la bienvenida del presidente Abbas y dijo que su peregrinación a Tierra Santa no habría sido completa se no visitase la ciudad de Belén, la Ciudad de David y lugar del nacimiento de Jesucristo.
En reunión de prensa junto al presidente de la ANP, el Papa defendió la creación de un Estado Palestino.
«La Santa Sede apoya el derecho de su pueblo a una patria soberana Palestina en la tierra de sus antepasados, segura, en paz con sus vecinos, con las fronteras internacionalmente reconocidas. Y mientras ese objetivo parece distante, pido al señor (Abbas) y a su pueblo que mantengan viva la llama de la esperanza, esperanza de que se pueda encontrar un punto de encuentro entre las legítimas aspiraciones tanto de los israelíes como de los palestinos en vista de la paz y de la estabilidad», afirmó.
Benedicto XVI pidió que palestinos y judíos se pauten por el respeto mutuo y que sean tolerantes.
«Una coexistencia justa y pacífica entre los pueblos de Oriente Medio puede realizarse solamente por medio del espíritu de cooperación y de respeto recíproco, en que los derechos y la dignidad de todos sean reconocidos y respetados», reafirmó.
Enseguida, el pontífice saludó al pueblo palestino y resaltó que sabe cuánto ellos sufrieron y continúan sufriendo por causa de los conflictos que arrasan esa tierra. «Tengo en el corazón a las familias que perdieron sus casas. Expreso mi solidaridad y proximidad a las personas que perdieron sus familiares en las hostilidades, sobre todo, en el reciente conflicto efectuado en la Franja de Gaza», subrayó el papa.
Él apeló nuevamente a la comunidad internacional para que haga todos los esfuerzos posibles en pro de la solución de los conflictos y que ayude en la reconstrucción de casas, escuelas y hospitales destruidos en la reciente ofensiva en Gaza.
A pesar de esto, Benedicto XVI aclamó a jóvenes palestinos a no dejar que las pérdidas de vidas humanas en los conflictos y las destrucciones causen amargura y resentimiento en sus corazones. «Tengan el coraje de resistir a toda tentación sin recurrir a actos de violencia y al terrorismo. Promuevan la paz y el futuro de Palestina. Que se cumpla en esta tierra el cántico de los ángeles que resonó en este lugar: paz en la tierra a los hombres de buena voluntad», concluyó el Papa.
El Papa también defendió una mayor libertad de movimiento para los palestinos, con el permiso de tener contacto con familiares y el acceso a los lugares santos.
ANP
Mahmoud Abbas, por su vez, denunció a la ocupación israelí de Cisjordania afirmando que «En esta Tierra Santa están aquellos que continúan construyendo muros de separación en vez de puentes, y que fuerzan a musulmanes y cristianos a abandonar esta tierra», dijo Abbas, que acusó que «las casas son derrumbadas y los terrenos confiscados».
El presidente de la ANP también destacó la necesidad de «dos Estados soberanos, que vivan uno a lado del otro, en paz y estabilidad, y pidió una solución para el problema de los refugiados» y reivindicó Jerusalén Oriental como capital del futuro Estado palestino.
«Queremos la paz y tenemos la esperanza de que mañana no habrá ocupación, puestos de bloqueo, prisioneros o refugiados, sino solamente convivencia y bienestar», dijo Abbas.
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