domingo, 19 de mayo de 2024
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Iglesia en Túnez convoca a un día de ayuno y oración por la paz en el mundo árabe

Túnez (Viernes, 23-08-2013, Gaudium Press) El próximo domingo 25 de agosto fue declarado por la Iglesia Católica en Túnez como un día de oración y ayuno por la paz en toda la región del Norte de África y Medio Oriente. Los recientes hechos de violencia registrados en Egipto y que afectan notablemente a la población minoritaria católica, sumados a la situación crítica de Siria, que padece un conflicto de más de dos años y medio de duración, son los signos más claros de la necesidad de la oración para implorar la intervención de Dios en favor de estos pueblos. «Creemos que Dios es el Señor de la historia, y por la fe sabemos que, incluso a través de las dificultades, todo contribuye al bien de quienes lo aman con sinceridad», recordó el Arzobispo de Túnez, Mons. Ilario Antoniazzi en un comunicado reproducido por la agencia Fides.

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Mons. Ilario Antoniazzi, Arzobispo de Túnez.

«Nuestra Iglesia sigue con sufrimiento los dolorosos e inestables acontecimientos que suceden en varios países árabes, del Oriente Medio y de África», manifestó Mons. Antoniazzi. En medio de la angustia que produce en las comunidades la situaciones de inestabilidad y violencia, el Arzobispo hizo un llamado a acudir con confianza a Dios: «Sabemos que el Corazón Misericordioso del Señor nunca queda indiferente ante ningún sufrimiento».

Por este motivo, Mons Antoniazzi, y «en solidaridad con todos nuestros hermanos y hermanas que sufren» sin distinción de credo, «pedimos a nuestra comunidad: consagrar el próximo domingo (25 de agosto) a la oración y al ayuno por la paz; a exhortar en las homilías del domingo a tomar parte en la iniciativa; a proponer a nuestros hermanos y hermanas enfermos que ofrezcan sus sufrimientos al Señor por la paz».

La iniciativa busca fomentar el espíritu de unidad de la Iglesia a través de los países de la región y aportar espiritualmente para el final de los conflictos y el retorno de la convivencia y la libertad religiosa de las comunidades. «Que a través de la intercesión de la Virgen María, Madre de Dios, nuestra Madre y Reina de la Paz, el Señor nos bendiga y bendiga a cada uno de nuestros países», concluyó el Arzobispo.

Con información de Agencia Fides.

 

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