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Ciudad del Vaticano (Lunes, 27-01-2014, Gaudium Press) El Papa Francisco recibió el sábado pasado a representantes del Centro Italiano Femenino, y ante ellas resaltó el imprescindible papel al interior de la familia de la mujer, en «la transmisión a las generaciones futuras de sólidos principios morales y para la misma transmisión de la fe». El Pontífice también destacó la aportación de la mujer en los espacios que se le han abierto en la sociedad.
El Papa agradeció las labores realizadas por el Centro en sus 70 años de funcionamiento, e hizo un recuento de documentos magisteriales sobre la mujer, como la Carta Apostólica de Juan Pablo II Mulieris Dignitatem, el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz en 1995 y la reciente exhortación apostólica Evangelii Gaudium.
«Estos nuevos espacios y responsabilidades que se han abierto, y que deseo vivamente puedan ampliar la presencia y la actividad de las mujeres, tanto en el ámbito eclesial como en el civil y profesional, no pueden hacer olvidar el rol insustituible de la mujer en la familia», expresó el Pontífice. Al tiempo dijo que características propias del alma femenina como la delicadeza, sensibilidad y ternura, «representan no sólo una fuerza genuina de la vida familiar, para la irradiación de un clima de serenidad y armonía, sino una realidad sin la cual la vocación humana sería imposible » .
El Papa Francisco colocó una vez más en realce el papel de la Virgen en la Iglesia y su ejemplaridad para toda mujer cristiana.
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