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Madrid (Lunes, 31-02-2014, Gaudium Press) Claridad, amabilidad, inteligencia, todos dotes que lo caracterizan, fueron los empleados por Mons. José Ignacio Munilla, obispo de San Sebastián, España, para desmontar los argumentos pro-aborto que le eran expuestos en entrevista realizada en el canal ETB2.
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Mons. Munilla Foto: agenciasic |
Favorecer el aborto, es sumir a la sociedad en el egoísmo; ese desprecio de la vida humana naciente, conduce a la autodestrucción: «Si no respetamos la vida no es posible la democracia», señaló el prelado.
El obispo resaltó la labor de la Iglesia en el acompañamiento de la mujer encinta y dijo que la sociedad tiene que preocuparse por ayudarla de todas las maneras posibles. Mons. Munilla habló también del proyecto Raquel, atención espiritual a mujeres que han abortado y que siguen sufriendo las secuelas espirituales, psicológicas y físicas de ese hecho. «La mujer ya es madre desde la concepción y tendrá un hijo vivo o muerto», expresó.
«Hay una gran incoherencia en que seamos tan sensibles hacia la ecología animal y tan insensibles hacia el respecto a la vida humana», denunció el obispo. Monseñor Munilla no dudó ni un momento en ser políticamente incorrecto porque «necesitamos ser sacudidos ante nuestras incoherencias». Igualmente recordó que la primera legislación ecologista la realizó Hitler en Alemania en noviembre de 1934, el mismo que acabó con millones de vidas humanas en los campos de concentración.
El obispo también destacó que políticas abortistas ocasionan el desbalance de 120 millones de mujeres menos que hombres, que se vive hoy.
Con información de Infocatolica
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