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Yujiang (Lunes, 09-06-2014, Gaudium Press) Una nueva grave violación a la libertad religiosa fue denunciada en China por parte de miembros de la Diócesis de Yujiang, no reconocida oficialmente por las autoridades. Se trata de la desaparición hace dos semanas de su Administrador Apostólico, P. John Peng Weizhao. El presbítero fue detenido en la residencia sacerdotal donde habitaba en presencia de autoridades de Asuntos Religiosos y llevado a un lugar desconocido. Los funcionarios niegan conocer su localización y no se han publicado los supuestos motivos que sustentarían su detención.
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| Celebración de la Iglesia subterránea de la provincia de Jiangxi con motivo de la Ordenación Episcopal del Obispo de Nanchang, Mons. John Baptist Li Suguang,en 2010. Foto: Asia News. |
«Sacerdotes que estaban en la escena cuando fue tomado el P. Peng reconocieron a varios oficiales de asuntos religiosos del distrito de Linchuan», comentó una fuente anónima al informativo UCANews. «Pero cuando fueron a los oficiales para preguntar su paradero la semana pasada, los oficiales dijeron que no sabían nada porque esa fue una acción del gobierno provincial».
El control de las autoridades sobre la provincia de Jiangxi se extendió a pretender crear una única diócesis en 1985, razón por la cual las diócesis existentes pasaron a ser clandestinas pero siguieron bajo la autoridad de la Santa Sede. El Obispo de Yujiang, Mons. Thomas Zeng Jingmu quien renunció a causa de su avanzada edad y quien sufrió más de un año de detención a sus ochenta años de edad y grave estado de salud, fue reemplazado en 2012 por el P. Peng en condición de Administrador Apostólico. Su nombramiento nunca fue reconocido por las autoridades civiles.
La detención del sacerdote se produce en medio de una oleada de demoliciones de lugares de culto cristiano y la declaración de la religión como una «amenaza para la seguridad» en un reciente informe académico oficialista (ver noticia anterior). Mientras se evalúa el impacto que la desaparición del prelado pueda tener en la difíciles recomposición de las relaciones entre China y la Santa Sede, los católicos «subterráneos» de Yujiang sufren la presión oficial. «Los sacerdotes evitan especular sobre las razones de su detención al teléfono porque ellos mismos están también bajo vigilancia», concluyó la fuente anónima en sus declaraciones a UCANews.
Con Información de UCANews.
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