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Niños aprenden a rezar escribiendo una historia

Valencia (Miércoles, 14-01-2015, Gaudium Press) Se llama «Mi lápiz para Dios», y es un juego didáctico y catequético que ayuda a los más pequeños a rezar y a poner en manos de Dios el día a día. La iniciativa, ideada por Loreto Bellot, originaria de Valencia, España, quien ha dedicado su vida profesional a la educación, se inspira en las palabras de la beata Madre Teresa de Calcuta: «Yo soy el lápiz de Dios. Un trozo de lápiz con el cual Él escribe aquello que quiere».

«Se me ocurrió que cuando tu naces, Dios empieza un libro en blanco y lo que realmente quiere es que, como dice la Madre Teresa de Calcuta, seamos un lápiz en sus manos y le gusta de verdad que escribamos con Él su propia historia y le contemos cada día lo que nos pasa», comentó la autora a Rome Reports.

El juego consiste en un bote que contiene en su interior 31 fichas numeradas -para que sean utilizadas a lo largo de un mes-, cada una con un texto sencillo que contiene un saludo a Jesús, para que cada día se haga de manera diferente; una sugerencia de un tema en la que el niño puede contar algo y una petición de ayuda que el pequeño hace a Dios; y así poner en práctica conceptos básicos de la fe cristiana. Como agregó Bellot: «Con ese lápiz aprendían realmente a hablar con Dios y a tratarlo de una manera totalmente cotidiana y realmente lo que queremos, ¿no? que esa religión, que esa doctrina, se haga vida».

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El juego ha ganado acogida como material de catequesis para las clases de religión. / Fotos: Editorial Brief y Mi lápiz para Dios.

Este proyecto nació tras una serie de actividades realizadas en el colegio en el que trabaja Bellot con las que se buscaba ayudar a los niños más pequeños a conocer a Jesús y a tener un encuentro con Él. «A rezar, como casi todo, se aprende. También a saber estar en un lugar sagrado y, sobre todo, a saber que decir», dice la autora en la página web de la iniciativa.

De allí se tomó como inspiración las palabras de la Madre Teresa que -como se expone en el sitio web- «encajaban perfectamente con la idea de descubrir el sentido espiritual de la propia existencia desde los primeros años, y guiar a cada uno hacia un mundo interior completamente real». Luego se elaboraron unos textos sencillos con un lenguaje dirigido a los niños, se plasmaron en una caja de cartón y se colocaron en el colegio en un lugar dedicado a la oración.

«La sorpresa fue, que no solo los pequeños, sino los padres, profesorado, alumnos de otros cursos empezaban a usa esos lápices cuando iban a rezar», dice la autora en el site.

El proyecto cuenta ya con dos años y ha llegado a muchos, ganando una especial acogida como material para las clases de religión.

«La sencillez, tanto en el contenido como en el formato, facilita el uso diario de estos materiales fuera del entorno del aula y los hace especialmente aconsejables para sesiones de catequesis, clases de religión o para uso familiar», se agrega en la página web.

Con información de Rome Reports y milapizparadios.com.

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