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Saint Paul (Sábado, 31-01-2015, Gaudium Press) Con motivo del aniversario número 70 de la liberación del campo de concentración nazi de Auschwitz, una superviviente del Holocausto, Anita Dittman, denunció que ya no puede contar su testimonio en escuelas de Estados Unidos. El motivo de esta inusual censura es que su testimonio está marcado a su encuentro personal con Cristo en medio de las terribles condiciones de su cautiverio y la mención de Jesús resulta inadmisible para las instituciones educativas. «¿No puede dejar a Cristo fuera?», llegó a sugerir un administrador escolar de Minnesota que la había invitado por recomendación de estudiantes según relató la sobreviviente a WND.
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| Anita Dittman, sobreviviente del Holocausto quien afirma que Cristo es el protagonista de su historia. Foto: Jewish Voice. |
La respuesta de Dittman, autora del libro «Trapped in Hitler’s Hell» (Atrapada en el infierno de Hitler), fue «Él es quien me mantuvo a salvo. a Él no lo puedo sacar», lo que le valió la cancelación de su invitación. La situación se repite en numerosos lugares y su advertencia de que su testimonio habla de su experiencia de fe cristiana origina en las autoridades educativas silencios incómodos seguidos de alguna excusa para rechazar la presentación. «Los niños desean escuchar, los profesores desean escuchar. Pero más arriba está el problema».
La situación ha llegado a ser tan incómoda que varias escuelas que le permiten compartir su testimonio hacen firmar a los padres de familia una autorización que certifique su aprobación de que sus hijos reciban un testimonio que contiene temas religiosos. Sin embargo, Dittman denunció que muchos padres no tienen oportunidad para pronunciarse debido a que las escuelas vetan el evento inmediatamente. «Se está poniendo peor, yo les digo», declaró la anciana sobreviviente. «Es muy dictador hacia los padres ahora. Es así como empezó en Rusia y Alemania».
Anita Dittman tiene ya 87 años y era tan sólo una niña judía de cinco cuando Adolfo Hitler llegó al poder en Alemania e instauró el régimen nazi. Durante 12 años de totalitarismo y al pasar la experiencia extrema de vivir en un campo de concentración, Dittman encontró la fe en Cristo. Su testimonio permaneció oculto durante muchos años, pero ella comenzó a compartirlo al llegar a los 50 años de edad.
«Desde mi llegada a América, había sido mi sueño y mi oración compartir los gloriosos milagros de Dios durante mis doce años y medio de persecución bajo el régimen nazi», afirmó Dittman en la presentación oficial de su libro. Su escritura, apoyada por la escritora Jan Markell se hizo posible en el invierno de 1977 tras un proceso personal de reafirmación de su fe.
Con información de WND.
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