Redacción (Miércoles, 13-01-2016, Gaudium Press) Unas monedas antiguas con diversas representaciones del rosto de Cristo son las más recientes investigaciones que vendrían a reforzar la autenticidad del Santo Sudario de Turín, lienzo funerario con el que se cree se envolvió el cuerpo de Jesús tras su crucifixión.
Los nuevos hallazgos, así como las numerosas pesquisas que se han realizado desde hace años en torno a la Sábana Santa, están recogidos en el libro «2015.La nuova indagine sulla Sindone… Duemila anni di storia e le ultime prove scientifiche» -«2015. La nueva investigación sobre el Santo Sudario… Dos mil años de historia y las últimas pruebas científicas»- del profesor emérito de Medicina Legal de la Universidad de Turín y presidente honorario del Centro Internacional de Sindología, Pierluigi Baima Bollone, que fue publicado para Italia por la editorial Priuli&Verlucca.
La Sábana Santa en la reciente Ostension Extraordinaria del 2015 / Foto: Gaudium Press – Sonia Trujillo. |
El texto propone un doble objetivo que es el de «establecer una conexión entre los conocimientos sobre la Síndone, las más recientes exegesis de la narración de la Pasión y de la Crucifixión neotestamentaria y los más modernos descubrimientos en el ámbito humanístico, arqueológico, de ciencias médicas y físicas», como explica el autor en el libro.
Entre las investigarnos recientes que se destacan, están justamente los hallazgos de monedas antiquísimas en las que se representó un rostro que coincide con el impreso en la Sábana Santa.
Estas representaciones del rostro de Cristo que recuerdan al de la Síndone ya se realizaban desde el siglo III, pero la primera prueba histórica más fiel al Sudario es de finales del siglo VII, cuando fue reproducido en monedas de oro y de plata que datan del primer periodo de Justiniano II, es decir entre el 685 y 695, justamente después del Concilio Trulano -conocido como el concilio Quinisexto- en el que se dispuso que la imagen de Cristo fuese incorporada no de manera simbólica, sino como un hombre.
Lo que llama la atención de estas monedas -según se cuenta en el libro- es la increíble coincidencia del rosto allí representado con el del sagrado lienzo de Turín: los cabellos largos tras el hombro derecho y delante del izquierdo, la ceja izquierda más arqueada que la otra con motivo de una tumefacción, un mechón central parecido al de la imagen hemática con forma de épsilon en la misma ubicación topográfica, la mano con sólo cuatro dedos largos por causa del rigor mortis, igual que en el Sudario, entre otras características como el respeto y la correspondencia de las proporciones.
«Es evidente la exclusiva dependencia del rosto de la Síndone (…) Hoy no es sólo verosímil, sino verdaderamente fuera de dudas que se tomó, como modelo para difundir y publicitar el rostro de Cristo, el de la Síndone, que permitía presentarlo con caracteres identitarios precisos», dice el autor en la obra.
La Catedral de Trurín en Italia custodia la Síndone desde 1578. |
El Santo Sudario es una sábana de lino de grandes dimensiones -tiene 4.36 metros de largo por 1.10 metros de ancho- en la que quedó milagrosamente estampada la figura de un hombre que fue torturado, flagelado y crucificado. El manto es custodiado desde el 1578 por la Catedral de Turín donde se expone al público sólo en algunas ocasiones, como ocurrió el pasado 2015 en la más reciente Ostensión Extraordinaria que tuvo lugar al conmemorarse en la ciudad italiana el bicentenario de nacimiento de San Juan Bosco, fundador de la Congregación Salesiana.
El Sudario, en los últimos años, ha sido sometido a más de mil investigaciones científicas de varias especialidades, algunas controvertidas, otras que apoyan la autenticidad del lienzo sagrado, como los hallazgos de polen que confirmaron los orígenes geográficos de la reliquia. Todas estas pesquisas han hecho que la Sábana Santa sea la reliquia más estudiada de la historia.
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Con información de Aleteia y ACI.
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