martes, 16 de abril de 2024
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Basílica de Saint Denis, Francia, exhibe reliquia de la Santa Túnica de Cristo

Argenteuil (Miércoles, 30-03-2016, Gaudium Press) La llamada Santa Túnica de Cristo, una reliquia venerada desde la Edad Media en Argenteuil, Francia, ha sido expuesta desde el Viernes Santo y por un tiempo de 16 días en la Basílica de Saint Denis. La exposición se realiza de modo extraordinario en esta ocasión, ya que normalmente sólo se realiza dos veces cada siglo, siendo la más reciente en 1984.

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«La Túnica de Cristo fué el hábito que Jesús llevó durante las últimas horas que precedieron su muerte. Es el vestido de la institución de la Eucaristía, de la agonía en Getsemaní, del arresto en el Huerto de los Olivos, del comparecer ante del Sanhedrin y delante de Pilato y durante la subida al Vía Crucis», explica la presentación oficial de la Ostención. «Tejida de arriba hacia abajo, la túnica de Cristo es llamada ‘inconsútil’ es decir sin costura. Vestida en el Vía Crucis de Jesucristo, la Túnica recogió la sangre de sus heridas. Las primeras comunidades cristianas lo consideraron como una reliquia de gran valor y lo conservaron durante varios siglos en Oriente».

Mons. Stanislas Lalanne, Obispo de Pontoise y «Custodio de la Santa Túnica», estableció la exposición pública por ocasión del Jubileo de la Misericordia, los 50 años de fundación de la Diócesis y los 150 años de la construcción de la Basílica, según informó L’Osservatore Romano. La próxima ostención ordinaria tendrá lugar en el año 2034.

Según informó Catholic Culture se calcula entre 150 mil y 200 mil el número de peregrinos que se esperan hasta el final de la ostención, el próximo 10 de abril. En la apertura de la exposición pública por lo menos 100 agentes de policía coordinaron las labores de seguridad para prevenir cualquier ataque anticristiano en el templo.

La Túnica conservada en Francia es la misma ofrendada por la Emperatriz Irene de Constantinopla al Emperador Carlomagno en el siglo IX, quien a su vez la donó al Monasterio de Argenteuil, donde su hija Théodrade fue priora. La reliquia se conserva enrollada en un relicario especial. La veneración de la reliquia incluye el paso por la Puerta Santa de la Basílica y el acceso al sacramento de la Penitencia a fin de ganar las indulgencias concedidas por el Jubileo de la Misericordia.

Con información de L’Osservatore Romano y Catholic Culture.

 

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