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Ciudad de México (Jueves, 29-06-2017, Gaudium Press) La Arquidiócesis de México comunicó el pasado 28 de junio que el sacerdote José Miguel Machorro, quien fue brutalmente atacado en la Catedral el día 15 de mayo, dejó finalmente la unidad de Cuidados Intensivos. El presbítero «ha sido trasladado de Cuidados Intermedios a un cuarto normal del hospital, con una importante mejoría de los severos daños que le provocó su agresor con un arma punzocortante», según divulgó SIAME.
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| Catedral Metropolitana de México. Foto: Remster_9 |
La notable mejoría que significó incluso sorpresa a causa de la gravedad de las heridas fue antecedida por un periodo de incertidumbre, ya que se sometió al sacerdote » a un prolongado tratamiento en el campo de la rehabilitación neurológica y pulmonar, tras el cual existía una alta probabilidad de que quedara con una importante incapacidad motriz y respiratoria de manera permanente» de acuerdo al sistema informativo arquidiocesano.
«Los últimos informes, dados a conocer este martes por el personal médico de la institución, señalan que el estado de salud del P. José Ángel Machorro mejoró sorprendentemente en las últimas 48 horas, de manera que ha sido trasladado del Área de Cuidados Intermedios a un cuarto normal, donde convalece sin necesidad de apoyo respiratorio mecánico, además de que se le ha eliminado ya la traqueotomía», concluyó el reporte.
El P. Machorro fue atacado por el joven Juan René Silva Martínez, quien padecería un trastorno psicótico y estaría obsesionado con un videojuego de asesinos al punto de tatuarse en el pecho uno de los símbolos del mismo. El atacante ingresó a la Catedral portando un arma y avanzó hasta el Altar Mayor, donde intentó asesinar al sacerdote. Fue capturado pero fue declarada «inimputable» por enfermedad mental, un dictamen calificado por la Arquidiócesis como » superficial y precipitado».
Con información de SIAME.
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