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Asunción (Lunes, 29-01-2018, Gaudium Press) En el aniversario número 50 de la muerte de San Pío de Pietrelcina y el centenario de la aparición de los estigmas de la Pasión de Jesucristo en su cuerpo, la reliquia del corazón del Santo capuchino visitará Paraguar, según la información ofrecida por los Hermanos Capuchinos el pasado 23 de enero. La reliquia visitará Catedrales, templos y capillas de la Arquidiócesis de Asunción y las Diócesis de San Lorenzo y Ciudad del Este, además de varios hospitales, bajo el lema «El corazón de San Pío visita el Corazón de América… y quiere encontrarse contigo».
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«Que la reliquia de su corazón venga a visitarnos y justamente llegará, Dios mediante, el día de nuestro aniversario, el 10 de abril, lo sentimos como un gran regalo de Dios y una prueba más de la cercanía y del amor de San Pío por lo que estamos haciendo», expresó a ACI el hermano capuchino Valentín Pesente, quien afirmó que la comunidad recibe este don cuando celebra 30 años de presencia en el país. «Esperamos que esta semana que pasará con nosotros, visitando cada uno de nuestros conventos sea una bendición que nos ayude a consolidar nuestra presencia capuchina y nuestro compromiso en el servicio de la Iglesia y de los más necesitados».
La reliquia del corazón del Santo, una parte del miocardio venerado por separado desde la visita papal de Benedicto XVI a San Giovanni Rotondo tiene un significado especial porque recuerda el fenómeno místico de transverberación, experimentado por San Pío en 1918. El religioso sintió que su corazón fue traspasado por un dardo encendido que dejó una «herida de amor» que fue el preludio de los estigmas. «Estaba yo confesando a nuestros muchachos en la tarde del día cinco, cuando, de repente, me sentí dominado por un extremo terror a la vista de un personaje celeste que se me presentaba ante la vista de la inteligencia», relató el Santo en su epistolario. «Tenía en su mano una especie de arnés, instrumento semejante a una larga lámina de hierro, con una punta muy afilada y que parecía que de esta punta saliese fuego. ver todo esto y observar cómo dicho personaje lanzaba dicho arnés con gran violencia sobre el alma, fue todo una misma cosa. lancé un muy apurado lamento; me sentí morir. dije al niño que en aquellos momentos estaba confesando, que se retirase porque me sentía mal y no podía seguir las confesiones».
San Pío de Pietrelcina, recordado devotamente como «Padre Pío», nació en Pietrelcina, Italia, el 25 de mayo de 1887. Vivió una vida religiosa discreta como capuchino, pero las manifestaciones sobrenaturales de diversos dones atrajeron numerosos fieles a quienes servía sobre todo en el Sacramento de la penitencia. Sufrió graves incomprensiones y acusaciones, pero finalmente la Iglesia reconoció la veracidad de sus dones. Su fiesta se el día 23 de septiembre.
Con información de ACI.
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