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Managua (Lunes, 01-10-2018, Gaudium Press) «El impío es descrito como el que oprime al pobre, no tiene compasión de la viuda ni respeta al anciano. El impío tiene la pretensión de creer que su ‘fuerza es la norma de la justicia’. Someter a los más frágiles, usar la fuerza en cualquiera de sus formas: imponer un modo de pensar, una ideología, un discurso dominante, usar la violencia o represión para doblegar a quienes simplemente, con su hacer cotidiano honesto, sencillo, trabajador y solidario, expresan que es posible otro mundo, otra sociedad»: son palabras de Mons. Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, en su homilía dominical del pasado 23 de septiembre. El obispo postea sus homilías en su canal de Youtube.
Ante la injusticia, Monseñor Báez contrastó la actitud de Jesús, que «sabe que su camino es el del justo perseguido».
El Señor «no está dispuesto a echarse atrás. No está dispuesto a bajar el tono de su denuncia al poder injusto y a la religión inhumana, no está dispuesto a negociar con nadie la misericordia de Dios y el lugar privilegiado de los pobres y excluidos en el corazón de Dios. Está dispuesto a correr la suerte de los hombres justos, en medio de una sociedad dominada por los impíos», resaltó el prelado.
Expresó también Mons. Báez que en Nicaragua son muchos los que siguen pensando que la grandeza está en mandar e imponerse, en hacer de sus caprichos ley y querer imponerla a los demás. Entretanto, es preciso que en el país se realice «una sociedad nueva según el querer de Dios».
Policía atacó a manifestantes en Managua
En el centro de Managua manifestantes anti-régimen se preparaban el sábado para iniciar su marcha, cuando fueron atacados con bombas de sonido, balas de goma y otro tipo de agresiones físicas por parte de la policía. También fueron agredidos en esa acción periodistas de medios internacionales.
Existe gran preocupación por alrededor de 20 manifestantes que fueron capturados, los cuales fueron trasportados en camionetas.
Especial realce ha sido dado a la retención de «La Coquito», Miriam del Socorro Matus, una anciana de cerca de 80 años que deseaba participar de la manifestación, y que permaneció capturada por varias horas en El Chipote, sede de la Policía que ha sido señalada por organismos defensores de derechos humanos como lugar de tortura. La Coquito se tornó famosa cuando a pesar de ganar menos de dos dólares por día, decidió en mayo regalar agua y galletas a un grupo de manifestantes que no tenían con que pagarle. La señora Miriam ha sido clara en su rechazo a las muertes habidas en las protestas contra el régimen y es una de las figuras que se han convertido en símbolo del rechazo al sandinismo.
Horas antes de la marcha reprimida, la Policía había emitido comunicado en el que se criminaliza a organizadores y participantes de protestas ciudadanas en Nicaragua. Al respecto, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) se posicionó, afirmando en su cuenta Twitter que la declaración de la Policía «viola normas básicas de la responsabilidad penal» y que «generan además un efecto inhibidor en las personas que quieren libremente ejercer sus derechos a reunirse, manifestarse y expresarse». En el mismo sentido se pronunció la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Con información de Vatican News
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