Cardenal Filoni habla de cómo Benedicto recibía a las víctimas de abuso

El antiguo sustituto de la Secretaría de Estado conoció de cerca esos encuentros.

Redacción (28/01/2022 17:44, Gaudium Press) A raíz de las noticias que han circulado en días recientes sobre Benedicto XVI, sobre supuestos encubrimientos del Papa emérito a sacerdotes pedófilos cuando era Arzobispo de Munich, el Cardenal Fernando Filoni ha escrito unas líneas que tratan de “¿Quién es Benedicto XVI?”

El Cardenal Filoni, antiguo sustituto de la Secretaría de Estado, y ex prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, conoce bien a Ratzinger.

“Tuve la oportunidad de acompañarlo a los diversos países donde realizó sus viajes apostólicos. En esos años, el tema de la pederastia surgió con virulencia en la Iglesia. No se conocía en los términos con los que ha ido surgiendo desde entonces. Pero siempre tuve claro que Benedicto XVI estaba dispuesto a afrontarlo con determinación. En esto puedo testimoniar ante todo su profunda y altísima honestidad moral e intelectual”, dijo el purpurado.

“Esto es incuestionable – continúa, aunque no falten los que hoy lo ataquen. Son libres de hacerlo, pero puedo afirmar que nunca he encontrado en él ninguna sombra o intento de ocultar o minimizar nada. Tampoco puede confundirse su sensibilidad para tratar las cosas con un profundo sentido moral con incertidumbre o cualquier otra cosa”.

Un hombre de Iglesia, que lloraba con la Iglesia

El purpurado italiano, por sus diversos cargos, estuvo en la preparación de diversos viajes apostólicos de Benedicto. En ellos, también surgió el tema de la pederastia al interior de la Iglesia.

“Tenía una notable sensibilidad por las víctimas. Cuando, en preparación de viajes apostólicos (a Estados Unidos, Australia, etc.), recibió solicitudes de encuentros con víctimas de abusos, me habló de ellos; quería saber mis pensamientos sobre cómo acomodar estas solicitudes. Puedo afirmar que aconsejó dos cosas que para él eran muy importantes”, expresó. Estos dos temas era, profundo respeto por las víctimas, y un verdadero encuentro espiritual con ellas, no simples ‘audiencias’.

“En aquellos encuentros no sólo se sentía la humillación sufrida por las víctimas, sino también la humillación de un hombre de Iglesia que nunca hubiera podido imaginar que pudieran ocurrir hechos tan degradantes, y sin embargo ahora ofrecía el bálsamo de una oración y el alivio de la solidaridad en nombre de ese Dios que se había humillado y tomado sobre sus hombros la condición humana y sus pecados”.

“En cada encuentro siempre hubo un verdadero reconocimiento de que lo humano y lo espiritual habían sido violados, recuerda el Cardenal Filoni. Siempre estuvo la entrega a Dios hecha por hermanos y hermanas profundamente conmovidos; hubo un pedido de perdón de toda la Iglesia a Dios, y hubo un compromiso que vería a Benedicto XVI aunar misericordia y justicia. Eso lo hizo a través de pasos que antes no habían existido”.

Con información de CNA