Menú 
Este 17 de junio se ha celebrado un funeral en la Catedral presidido por Mons. Gerardo Melgar. Doce sacerdotes de la diócesis murieron durante la emergencia sin tener la Misa de exequias.
Ciudad Real (17/06/2020 12:23, Gaudium Press) Muchos sacerdotes alrededor del mundo han entregado sus vidas con tal de dar a los moribundos del Covid-19 sus últimos auxilios espirituales, otros también han fallecido por edad avanzada, o enfermedades, sin poder recibir un digno funeral, debido al estado de alarma.
Entrando en las etapas de desconfinamiento, y pensando en los sacerdotes que han muerto en medio de la pandemia sin una misa de exequias, la Diócesis de Ciudad Real en España a celebrado este miércoles 17 de junio una Misa funeral por ellos.
La Eucaristía corpore insepulto, ocurrió a las 20:00, hora local, siendo presidida por el Obispo de Ciudad Real y Prior de las Órdenes Militares, Mons. Gerardo Melgar, además de transmitida por la página en Facebook de la diócesis, y el canal de YouTube de la misma.
12 sacerdotes
La Misa ha sido por 12 sacerdotes, tanto diocesanos como religiosos, que consagraron su ministerio presbiteral en el servicio a la diócesis y sus comunidades. Los sacerdotes son:
Francisco del Campo Real, quien murió el 22 de marzo a los 74 años. Fue canónigo de la Catedral de Ciudad Real y también delegado diocesano para las Causas de los Santos.
Francisco de Lora, sacerdote marianista, fallecido el 23 de marzo tras una larga enfermedad. Como religioso sirvió por muchos años en la educación y también en parroquias. Su última labor fue como capellán del Colegio de Nuestra Señora del Prado y formador de catequistas de Secundaria. También fue miembro de CONFER en Ciudad Real.
Mariano Mondéjar Soto, murió el 1 de abril en el Hospital de Ciudad Real cuando contaba con 90 años de edad.
Alfonso Luna Sánchez, tenía 65 años y era natural de Villamanrique. Falleció el 3 de abril en la residencia de los Hermanos de La Salle en Roma, donde vivía desde hace unos años.
Pedro Lozano Arias, contaba con 75 años cuando murió en la noche del 3 de abril en la localidad de Valdepeñas. Había sido ordenado sacerdote en 1969, tras su formación sacerdotal en el Seminario de Ciudad Real.
José Antonio García Rodado, tenía 84 años cuando falleció en Ciudad Real el pasado 11 de abril, Sábado Santo.
Francisco Bravo del Castillo, era natural de Madrid. Murió a los 85 años el 21 de abril en la localidad de Valdepeñas. Fue Arcipreste de Mancha de Sur y sirvió como ecónomo en varias parroquias.
Deogracias Sobrino Prieto, estaba jubilado desde el año 1998. Falleció a sus 90 años el pasado 22 de abril, en Ciudad Real.
Félix Fernández Villa, murió el 9 de mayo contando con 89 años de edad. Era originario de Hinojosas de Calatraba, y se había ordenado sacerdote en Campo de Criptana en 1958.
José Andrés Alejo, era sacerdote de la comunidad trinitaria. Tenía 79 años cuando la muerte los sorprendió. Fue profesor del Colegio de la Trinidad del municipio Alcázar de San Juan.
Ricardo Benito Grueso, fue ordenado sacerdote en Barcelona en 1967, y estaba incardinado a la diócesis de Ciudad Real desde 1976, donde realizó varias labores pastorales. Murió el 14 de mayo a sus 86 años.
Julián Ramírez Manzanares, era sacerdote de la localidad de Valdepeñas donde ejerció gran parte de su ministerio presbiteral. Falleció el 21 de mayo cuando tenía 89 años de edad.
Ver también:
Se contagió de Covid-19, al morir ofreció su vida por los sacerdotes
Con información de Diócesis de Ciudad Real.
Deje su Comentario