Habla de errores de traducción en el comunicado de respuesta. El embajador israelí Schutz también se muestra muy cuidadoso en entrevista.
Redacción (16/02/2024 13:03, Gaudium Press) Israel ha querido bajarle el tono a su respuesta a las recientes declaraciones del Cardenal Pietro Parolin sobre la guerra en Gaza.
El Secretario de Estado vaticano había dicho, saliendo de un encuentro con las autoridades italianas el martes, que si bien el ataque de Hamás del pasado 7 de octubre es más que condenable, y que Israel tenía todo el derecho a su defensa, cuando se habla de 30.000 muertos a consecuencia de las operaciones ya no se podría considerar que esa defensa fuera proporcionada. El purpurado también afirmó que era preciso ver como se paraba esa “carnicería”, palabra que en boca del ponderado Cardenal Parolin sonó más fuerte aún.
Leer también: Israel y Vaticano: posiciones ya antagónicas con relación a operaciones en Gaza
La embajada israelí ante el Vaticano emitió un comunicado diciendo que consideraba la declaración del purpurado “deplorable”, término que en italiano tiene el mismo sentido que en español, es decir miserable, vergonzosa, merecedora de reprobación.
Pues ahora la embajada israelí ha dicho que hubo un error de traducción, y que donde decía “deplorable” se debía haber escrito “desafortunada”, pues el original inglés decía “It is a regrettable declaration”. Es claro, algo desafortunado es menos grave que algo deplorable.
Pero al margen de consideraciones semánticas o lingüísticas, se puede percibir el deseo israelí de que la confrontación con el Vaticano en este asunto sea menos frontal.
Impresión que se confirma leyendo la entrevista publicada ayer concedida por el embajador Schutz al Libero Quotidiano en las que emplea un lenguaje mesurado, y destaca puntos positivos de la relación con el Vaticano, como su insistencia en la liberación de rehenes en poder de Hamás, y sus declaraciones contra el antisemitismo, al tiempo que afirma que lo que hay es una “falta de empatía” con lo que está ocurriendo en Israel desde el 7 de octubre.
En cualquier caso, las declaraciones el martes del Cardenal Parolin de alguna manera galvanizaron el sentimiento de muchos, de que Israel ha ido más allá de un cierto límite, y de alguna manera indican que el reloj corre en sentido inverso, en el sentido de que el Estado judío verá ir disminuyendo el apoyo que ahora recibe de Occidente para su operación en Gaza, apoyo que es fundamental, más si se tiene en cuenta que el propio embajador declaró al Libero Quotidiano que la guerra no es sólo contra Hamás, sino “al menos cuatro frentes: Gaza, Líbano, Yemen y Siria”, todos bajo la égida de Irán. (SCM)
Deje su Comentario