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Después de casi tres años de arresto, Lai inicia juicio el próximo 18 de diciembre, con base en la Ley de Seguridad Nacional. Se teme por su salud.
Redacción (29/09/2023 17:22, Gaudium Press) Jimmy Lai, el hombre, católico, que ya lleva más de 1000 días en prisión, solo por pedir que haya más democracia en su isla, que Hong Kong no sea deglutida por la voraz China continental.
El creó un servicio de medios, a cuya cabeza Apple Daily, en su momento uno de los mayores periódicos de la isla. Él quiso que estos medios dieran cobertura a las manifestaciones pro-democracia en Hong Kong, de 2019. ¿Qué pedían estas manifestaciones? Cosas no extrañas en Occidente, pero que lo son en un territorio que cada vez tiene menos autonomía, en beneficio del moloch Beijing: elecciones democráticas a la cámara legislativa, y comicios para elegir al jefe de gobierno local, es decir, que este no fuera electo por un comité.
Sí, el jefe de gobierno de esta Región Administrativa Especial china es elegido por un grupo de solo 1194 personas, muchas de ellas en buena medida afines al régimen comunista chino. Y Lai, así como muchos, la mayoría, pedía que esto no fuera así.
Pero en junio de 2021 los activos de las empresas de Jimmy Lai fueron congelados, con fundamento en una ya vigente ley de Seguridad Nacional, lo que obligó poco después al cierre de Apple Daily.
Claro que Jimmy Lai ya estaba en la cárcel, desde el 31 de diciembre de 2020. Dicen quienes lo han visto, que su fortaleza está en la lectura de la Biblia, este hombre que fue bautizado por el también luchador Cardenal Joseph Zen. Pero entre otras injusticias contra Lai, está la de que después de 1.000 días detenido, su principal proceso jurídico solo dará inicio el próximo 18 de diciembre, donde se defenderá de la principal acusación, de violación de la Ley de Seguridad Nacional impuesta por Beijing.
Ahora – recordando a Jimmy Lai – el Comité por la Libertad de Hong Kong, que reúne a 67 organizaciones de derechos humanos, pide en carta abierta a Joe Biden que el jefe del ejecutivo de Hong Kong, John Lee, y otros funcionarios no sean invitados a la cumbre de APEC, el foro de cooperación asiática del Pacífico, programado en San Francisco del 15 al 17 de noviembre. También piden sanciones a los funcionarios de la isla y contra los fiscales que han abusado de los poderes que les otorga esa liberticida Ley de Seguridad Nacional, impuesta por Pekín en junio de 2020, una ley que tiene el récord de 100% de condenas contra quienes se acusa de violarla.
Ahora se teme, según cuenta su hijo Sebastian Lai, que Jimmy Lai puede morir en la cárcel, su salud está débil: critica Sebastian al gobierno británico, y le dice que si por un lado afirman apoyar la causa de Jimmy – que tiene pasaporte británico – por otro siguen comerciando con China y Hong Kong como si nada ocurriese.
Mientras tanto, como informa Asia News, el hacha de las medidas judiciales sigue cayendo contra los exponentes del movimiento prodemocracia y sus familiares: seis meses después de ser detenida y puesta en libertad bajo fianza, el Departamento de Seguridad Nacional de la policía declaró que había acusado formalmente del delito de “obstrucción del curso de la justicia pública” Maria Tang, de 63 años, cuñada del activista Lee Cheuk-yan – también encarcelado en virtud de la Ley de Seguridad Nacional – y hermana de la sindicalista Elizabeth Tang, también arrestada y liberada unos días antes, en marzo, después de visitar a su marido detenido. Se espera que el caso de Maria Tang sea visto el 28 de septiembre en los Tribunales de Magistrados de West Kowloon.
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