Menú 
Hoy la Santa Sede publica política de inversiones. Estas no pueden contrariar la doctrina católica.
Foto: Kenny Eliason en Unplash
Redacción (19/07/2022 12:15, Gaudium Press) Algo que debería ser claro como el agua; pero bien, el Vaticano tuvo que recordar hoy, eque las inversiones de la Santa Sede deben “estar alineadas con las enseñanzas de la Iglesia Católica, con exclusiones específicas para inversiones financieras que contradigan sus principios fundamentales, como la santidad de la vida o la dignidad del ser humano o el bien común”.
Estas inversiones serán hechas por APSA, la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, y serán supervisadas por un comité de cuatro personas, presididas por el Cardenal Kevin Farrell.
La política de inversiones vaticanas define claramente líneas rojas, o minas que no se pueden pisar: no se podrá invertir en productos y tecnologías relacionadas con “la pornografía y la prostitución; juego; industria armamentística y de defensa; centros de salud pro-aborto; y laboratorios o empresas farmacéuticas que fabriquen productos anticonceptivos y/o trabajen con células madre embrionarias”.
Industrias que no están estrictamente prohibidas de inversión, pero que deben evitarse, son las de petróleo y minería, energía nuclear y bebidas alcohólicas.
Es claro, estas políticas no llegaron porque sí: el año pasado la Santa Sede fue acusada por un programa de investigación italiano de invertir alrededor de 24 millones de euros en compañías farmacéuticas involucradas en la producción de la abortiva “píldora del día después”.
Las líneas guía vaticanas ahora excluyen (y no se puede dejar de pensar aquí en la londinense Sloane Avenue) las inversiones diseñadas para ser especulativas o de una estrategia especulativa “a menos que sea necesario para la eficiencia de las transacciones de inversión o para cubrir el riesgo”.
Deje su Comentario