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Cabeza de episcopado alemán ignora nuevas advertencias del Secretario de Estado, relativas a la creación de lo que llaman Consejo Sinodal.
Cardenal Parolin
Redacción (24/01/2023 11:50, Gaudium Press) Una de las grandes críticas hechas por los Cardenales Ouellet y Ladaria al llamado Camino Sinodal alemán, con ocasión de la visita Ad Limina de 62 obispos teutones en noviembre pasado, fue contra el intento de ese cuestionado sínodo particular de crear un órgano mixto clero-laicos con poder de supervisión de todo en la Iglesia alemana, un Consejo Sinodal, que según determinación de ese sínodo en septiembre pasado, “tomará decisiones fundamentales de importancia supra-diocesana, sobre la planificación pastoral, las cuestiones de futuro de la Iglesia y las cuestiones financieras”.
A ese respecto el Cardenal prefecto de Doctrina de la Fe, Luis Ladaria, advirtió en ese entonces a los prelados alemanes que “para mantener siempre íntegro y vivo el Evangelio dentro de la Iglesia, los Apóstoles dejaron a los obispos como sus sucesores, entregándoles la autoridad de enseñar en su propio lugar”, y que “no es posible equiparar esta tarea delicada y decisiva en la vida de la Iglesia Católica con otros oficios en la Iglesia, como los de los teólogos y los expertos en otras disciplinas”, que sí pueden ser ejercidos por laicos.
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Sin embargo a la mayoría de los obispos alemanes, estas advertencias no los conmueven.
Es por esto que ahora cinco obispos de ese país de línea tradicional han pedido nuevas aclaraciones al respecto, que han sido respondidas por el Cardenal Secretario de Estado Parolin, y que nuevamente han suscitado la declaración de independencia de los obispos afines al Camino Sinodal alemán.
En efecto, reporta Infocatólica que tras pedidos aclaratorios de cinco prelados – el cardenal Rainer Maria Woelki (Colonia) y los obispos Gregor Maria Hanke OSB (Eichstätt), Bertram Meier (Augsburgo), Stefan Oster SDB (Passau) y Rudolf Voderholzer (Ratisbona) – el Cardenal Parolin ha enviado una carta al presidente del episcopado alemán, Mons. Georg Batzing, diciendo “que ni el Camino Sinodal, ni ningún organismo establecido por él, ni ninguna conferencia episcopal tiene competencia para establecer el ‘Consejo Sinodal’ a nivel nacional, diocesano o parroquial”, Consejo Sinodal que “parece situarse por encima de la autoridad de la Conferencia Episcopal y sustituirla de facto”, así como la autoridad de los obispos en sus diócesis.
La carta del Cardenal Parolin no es una mera opinión del purpurado, sino que lleva la co-firma de los Cardenales Ladaria y Ouellet –este último prefecto del Dicasterio para los Obispos– y ha sido aprobada de forma específica por el Papa.
Los obispos alemanes además, “no están obligados” a “participar en los trabajos del ‘Comité Sinodal’”, expresa Parolin.
Reacción del episcopado alemán: Roma lo
En comunicado de prensa publicado hoy, la Conferencia Episcopal alemana afirma que la Carta del Cardenal Parolin ha sido debatida en el Consejo Permanente de ese organismo, que el proyectado Consejo Sinodal no tiene más competencias que la Asamblea Sinodal del Camino Sinodal que está en curso, y que la preocupación expresada en la carta de que un nuevo organismo pudiera situarse por encima de la Conferencia Episcopal o socavar la autoridad de los obispos individuales no está justificada.
Según la Conferencia Episcopal Alemana, el Consejo Sinodal, que será preparado por el Comité Sinodal, se moverá dentro del derecho eclesiástico vigente. Según el comunicado de prensa, una gran parte del Consejo Permanente ha afirmado una vez más su voluntad de aplicar la resolución de la Asamblea Sinodal sobre el Comité Sinodal y de retomar las consultas. Es decir, siguen adelante.
Sigue adelante también la deriva doctrinal y pastoral de la Iglesia alemana
Concomitante con la reacción del episcopado alemán a la Carta del Secretario de Estado Parolin, reporta también Infocatólica la publicación de las “Directrices para la competencia en educación sexual en la atención pastoral/en los ámbitos de actividad de la Iglesia” de la diócesis de Limburgo, a cuya cabeza está el presidente del episcopado, documento en el que de acuerdo al resumen de Infocatólica, “se abandonan todos los puntos de vista católicos y se crea una nueva imagen del ser humano y de la sexualidad, orientada hacia la ideología de género. El obispo Bätzing, que publicó este documento para su aplicación tras una decisión del Consejo Sinodal Diocesano, se opone así una vez más a la doctrina de la Iglesia”.
El documento, que habla repetidamente de que cada persona debe encontrar su autodeterminación sexual, la cual debe ser respetada por la Iglesia. Afirma en el tercer punto que “No sólo hay sexualidad entre el hombre y la mujer. También entre mujer y mujer. O entre hombre y hombre. O entre personas que no se sienten ni mujer ni hombre”.
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