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Prohibido por los guardias suizos por falta de autorización, el individuo regresó “a gran velocidad, forzando el paso a través de los dos puntos de control, de la Guardia Suiza y del Cuerpo de Gendarmería del Estado de la Ciudad del Vaticano”.
Puerta de Sant’Anna – Foto: Vatican News
Roma (19/05/2023 11:07, Gaudium Press) Sobre las 20.00 horas de ayer, un hombre llegó a una de las entradas del Vaticano, la puerta de Santa Ana, y, después de ser impedido de continuar por los guardias suizos, por falta de autorización de acceso, regresó “a gran velocidad, abriéndose paso a través de los dos puestos de control de la Guardia Suiza y el Cuerpo de Gendarmería del Estado de la Ciudad del Vaticano”, según la oficina de prensa de la Santa Sede.
Un inspector de policía del Vaticano disparó a las llantas delanteras del vehículo, pero no pudo detenerlo. Se dio la señal de advertencia y se cerraron todos los demás puntos de acceso al Vaticano.
El coche acabó deteniéndose en el interior de Ciudad del Vaticano, en el Patio de San Dámaso, “y el hombre se bajó solo y fue detenido. Inmediatamente fue sometido a un examen médico (…) en el que se constató una grave afectación psicofísica” del conductor.
Este último, cuya identidad no ha sido precisada, se encuentra recluido en una celda del Vaticano y está a disposición de la Autoridad Judicial, concluye el comunicado.
El incidente tuvo lugar en la puerta de Santa Anna, una de las principales entradas al estado de la Ciudad del Vaticano, en el corazón de Roma.
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