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Jerusalén (Martes, 24-03-2020, Gaudium Press) Tierra Santa, a causa de la pandemia del Covid-19 a visto disminuir drásticamente el número de peregrinos. Los santos lugares, para prevenir la propagación de la enfermedad, han tenido que cerrar sus puertas; pero la oración no cesa; antes se ha incrementado gracias a los Franciscanos de la Custodia de Tierra Santa, quienes invitan ahora a peregrinar, pero con la oración.
«Es correcto suspender de manera temporal las peregrinaciones, y es correcto que estemos nosotros para rezar en los santos lugares por todos aquellos que no pueden venir a visitarlos, por todos aquellos que están sufriendo a causa de la pandemia, por todos aquellos que están dando la vida asistiendo a los enfermos», ha señalado fray Francesco Patton, ofm, Custodio de Tierra Santa en entrevista con Christian Media Center, medio de comunicación de la Custodia, para luego añadir:
«Rezamos, porque estos son los lugares que nos recuerdan el misterio de la salvación y tantas curaciones que el mismo Jesús obró».
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| Los Franciscanos de la Custodia oran en la Basílica del Santo Sepulcro / Foto: Custodia de Tierra Santa. |
Por esta razón fray Patton quiere proponer en este tiempo de crisis otro tipo de peregrinación, una que todo fiel cristiano puede realizar desde casa; se trata de la peregrinación de la oración:
«Es importante que hagamos una peregrinación de otro tipo, que es la peregrinación de la oración, una de las dimensiones más fuertes de una peregrinación. Una oración constante, diaria, incesante, para que cese la pandemia y para que se consiga encontrar un remedio. Y una oración incesante por los enfermos y médicos (…) por las personas que están sufriendo».
Así, desde la Custodia de Tierra Santa también se vienen haciendo accesibles, vía streaming, las celebraciones presididas por los Franciscanos, acercando así a los fieles los santos lugares, gracias a las nuevas tecnologías de la información.
«Esto permite a las personas mantener un contacto. Aquello que han estado aquí como peregrinos pueden de alguna manera volver a ver estos lugares, unirse espiritualmente a la celebración que tiene lugar aquí», explica el Custodio, quien agrega:
«Para nosotros es fundamental vivir la dimensión de la oración y del misterio que cada uno de estos lugares lleva consigo. A partir de los más importantes como el Santo Sepulcro o Belén, que está temporalmente cerrada. Para nosotros es fundamental celebrar, rezar, recordar que Dios ha venido entre nosotros en su Hijo y que en su Hijo Jesús ha vencido el mal. Incluso el mal físico, incluso las enfermedades y la muerte».
Justamente durante la segunda peregrinación cuaresmal de los Franciscanos a los santuarios de la Pasión de Jesús en Jerusalén, que ocurrió en la Basílica de Getsemaní, vinculada con la agonía de Jesús, los frailes se han unido en oración pidiendo a Dios fuerza y esperanza para el mundo entero.
Con información de Christian Media Center y Custodia de Tierra Santa.
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