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Beijing (Jueves, 02-08-2012, Gaudium Press) Un documento oficial del gobierno de China, con 16 artículos que señalan disposiciones gubernamentales para la Iglesia Católica, restablece el registro de los Obispos ante la Administración Estatal para Asuntos Religiosos. Esta oficina recibirá los informes de la organización oficialista china Asociación Patriótica y de la Conferencia de Obispos de la Iglesia Católica en China. Se interpreta que las nuevas regulaciones son la reacción del gobierno ante las tensiones renovadas por la renuncia del Obispo Thaddeus Ma Daqin a los cargos oficialistas en Shanghai y el rechazo de los católicos a la posterior restricción estatal al ejercicio de su ministerio.
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| En el centro de la controversia: Mons Thaddeus Ma Daqin renunció públicamente a los cargos oficialistas durante la Eucaristia de su ordenación como Obispo Auxiliar de Shanghai. Hoy no puede ejercer su ministerio y se encuentra recluido en un seminario local. Foto: UCA News. |
Las relación de la Iglesia en China con las autoridades está cambiado y la Santa Sede ha endurecido su posición frente a la intervención estatal en la vida eclesiástica. La reciente ordenación ilegítima de un obispo por parte de la Asociación Patriótica en la ciudad de Harbin motivó una fuerte condena del Vaticano y un generalizado ambiente de rechazo por parte de la comunidad católica local. La renuncia del Obispo Ma Daqin a los cargos oficialistas, expresada públicamente en la ceremonia de su ordenación episcopal, motivó los aplausos del pueblo católico en presencia de las autoridades y motivó las represalias del gobierno.
«Entendemos que el gobierno chino quiere manipularlo todo. (La nueva normativa) es un desafío a Roma y le dice al mundo que Beijing tiene control sobre las religiones, incluyendo la Iglesia Católica», declaró de manera anónima a UCA News un Obispo reconocido por la Santa Sede y el gobierno chino. Sin embargo, el prelado explicó que las normas no tienen ninguna novedad y solo reiteran políticas que habían sido establecidas en 2005. «Están repitiendo una canción vieja», comentó.
La disposición gubernamental podría ofrecer una justificación legal a la restricción impuesta al Mons. Ma Daqin, cuyo nombramiento autorizado por la Santa Sede también tenía reconocimiento de las autoridades civiles. «Los funcionarios pueden advertir al Obispo Ma que la Administración Estatal para Asuntos Religiosos no ha recibido sus documentos, por cuanto no estaría autorizado por los organismos oficiales», explicó el Obispo.
Mons. We Jinqyi, Obispo de Qiqihar, quien ejerce su ministerio sin reconocimiento estatal, expresó que la reacción del gobierno tiene su nota de ironía, ya que los inconvenientes para las autoridades tuvieron lugar durante ordenaciones autorizadas de acuerdo a sus propias reglas. Sus supuestos «correctivos» solo serán acatados por las comunidades «oficiales». El Obispo pidió a las autoridades una mayor coherencia en su dicurso: «El gobierno hace énfasis en mantener una sociedad armoniosa. La armonía general nos da espacio para sobrevivir», afirmó el prelado, en referencia a la Iglesia, que desea obedecer únicamente a la Santa Sede.
Con información de UCA News.
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