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Madrid (Viernes, 29-01-2016, Gaudium Press) El carisma de teólogo y filósofo de Santo Tomás de Aquino «ofrece un valioso modelo de armonía entre razón y fe. Dimensiones del espíritu humano que se realizan plenamente en el encuentro y en el diálogo entre sí», dijo el Arzobispo de Madrid, Mons. Carlos Osoro, en la homilía de la celebración Eucarística que presidió este jueves 28 -memoria litúrgica del santo italiano y Doctor de la Iglesia- en la capilla del Seminario Conciliar de Madrid – Universidad Eclesiástica San Dámaso.
En la ocasión destacó que la festividad de Santo Tomás «nos hace siempre vislumbrar la misma novedad: un santo que abre caminos y perspectivas». Especialmente cuando se habla de la razón humana que «respira, se mueve, en un horizonte amplio, abierto, donde puede expresar lo mejor de sí».
En otro momento, al destacar al santo como un maestro de diálogo con todos, el Arzobispo de Madrid llamó para que se redescubra «la racionalidad humana, abierta a luz de la palabra de Dios y a su perfecta revelación, que es Jesucristo, el hijo de Dios, que se hizo hombre.
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| El Arzobispo de Madrid presidió la Eucaristía en homenaje a Santo Tomás de Aquino luego de un acto académico que organizó la Universidad Eclesiástica San Dámaso, y ocurrió en el aula magna del Seminario Conciliar / Foto: Universidad Eclesiástica San Dámaso. |
Asimismo, resaltó la gran sabiduría de Santo Tomás, quien -de acuerdo con el prelado- «logró restaurar una confrontación fructuosa, con el pensamiento de su tiempo». Por esta razón -prosiguió-, «siempre será considerado un maestro actual de diálogo con las demás culturas y con todas las religiosas».
«La fe mueve la razón a salir del aislamiento y apostar por lo que es bello, bueno, verdadero», agregó.
En este sentido, animó a los presentes a tomar «este modelo de hombre que piensa y quiere armonizar y dialogar, y poner en diálogo al hombre consigo mismo, con los demás y con Dios», y los invitó a disfrutar, descubrir y acoger «la grandeza y la belleza de esta Iglesia que acoge a Dios (…), quiere mostrarlo a todos los hombres (…) moviendo a la razón a salir del aislamiento y apostando a lo que es bello, bueno, verdadero, y hacérselo conocer a todos los hombres».
«Seamos personas que, con nuestra vida, sepamos enseñar la medida verdadera (…) Santo Tomás de Aquino lo supo hacer muy bien, ¡qué clarividencia de sabiduría! ¡Qué fructuosa la confrontación que hizo con el pensamiento de su tiempo! Supo entregar y enseñar la verdadera medida del ser humano, proponiendo con una claridad tan bella y tan grande a la verdadera medida del hombre, que es Jesucristo (…) como midamos nosotros, nos medirán los demás. Si nosotros enseñamos la medida que el Señor nos ha regalado, seguros tenemos que estar de que esa misma medida nos la devuelva», añadió el Arzobispo de Madrid.
Finalmente, alentó para que en el Año Santo de la Misericordia «sepamos enseñar la verdadera alegría del hombre, que es Jesucristo». Algo que es un reto -de acuerdo con Mons. Osoro-, «pero que es posible con la gracia del Señor, de este Jesús que no tiene inconveniente».
El Arzobispo de Madrid presidió la Eucaristía en homenaje a Santo Tomás de Aquino luego de un acto académico que organizó la Universidad Eclesiástica San Dámaso, y ocurrió en el aula magna del Seminario Conciliar, ocasión en la cual el Padre Javier Prades renovó su cargo como rector de la institución educativa por cuatro años más.
Con información de Infomadrid – Archidiócesis de Madrid.
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