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Córdoba (Viernes, 25-11-2017, Gaudium Press) La Iglesia en Argentina está de celebración. El sábado 25 de noviembre contará con una nueva beata: La Madre Catalina de María Rodríguez, fundadora de las Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús, y colaboradora del Santo Cura Brochero.
Con ocasión de este gran acontecimiento, los obispos argentinos invitan a los fieles para que se unan esta celebración, evento que ocurrirá en la ciudad de Córdoba y será presidido por el Cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
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| La Madre Catalina de María Rodríguez, es la fundadora de las Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús |
«Quiero invitar muy cordialmente a la comunidad a participar en la beatificación de la Madre Catalina de María Rodríguez. La Iglesia nos va a proponer a esta mujer como intercesora nuestra delante de Dios, y también como modelo de vida cristiana. Señalando lo propio de su genio femenino, muy atenta a las necesidades de los más desprotegidos y con un fuerte compromiso hacia la tarea educativa», señaló Mons. Carlos José Ñáñez, Arzobispo de Córdoba, quien además dio la bienvenida a todos los que van a estar presentes en la ceremonia de beatificación.
Por su parte Mons. Jorge Lozano, Arzobispo Coadjutor de San Juan de Cuyo, dijo que la beatificación de Madre Catalina es una oportunidad para reconocer en ella a una amiga de Jesús y amiga de sus hermanos: «Una mujer que fue madre; le tocó cuidar a los hijos de su esposo viudo, ella se encargó de esa educación. Una mujer que alentó en su corazón el anhelo y el deseo de poder entregarse de enterito a Jesús. Una mujer que se animó a soñar».
Destacando este punto, Mons. Lozano señaló: «Quien se anima a soñar se anima, de alguna manera, a participar en la obra creadora de Dios. Toda la creación, todo el mundo, es el fruto de un proyecto, de un sueño de Dios. Cada uno de nosotros es parte de este pensamiento y sueño de Dios».
«Y los santos, en este caso Madre Catalina, -siguió el Arzobispo Coadjutor- se animaron a soñar que era posible encarnar el Evangelio aún en medio de todas las dificultades y vicisitudes que les tocó atravesar. A este anhelo ella le llamaba el ‘Sueño dorado’. Un sueño de ver hecho realidad un grupo de mujeres que se quisieran consagrar a Dios para servirlo en los más pobres, en los pequeños».
En este sentido, el prelado invitó para que se viva con mucha alegría este tiempo, «y que nos animemos también nosotros a tener nuestro sueños dorados en este tiempo».
Monseñor Santiago Olivera, Obispo Castrense y Delegado Episcopal para las Causas de los Santos, se refirió al lema de la beatificación «¡Catalina es de todos!»: «Tendremos la alegría de celebrar la beatificación de Catalina María. ¡Catalina es de todos! Es una gracia para la Argentina. Unámonos en la presencia ese día en Córdoba y también a través de la oración realmente agradeciendo a Dios porque una nueva beata se presenta a todos los argentinos como modelo de vida evangélica y consagrada».
Mientras tanto, Mons. Sergio Buenanueva, Obispo de San Francisco, dijo que «nos están llenando de santos. Brochero el año pasado, ahora Madre Catalina, y cuántos más van a venir. Eso es el Evangelio, se contagia, nos llena de alegría. Esa es la santidad: el perfume de Cristo en este mundo nuestro».
La Madre Catalina de María Rodríguez nació en Córdoba el 27 de noviembre de 1863. Casada a sus 29 años, queda viuda a los 42, iniciando la fundación de una comunidad de mujeres que tendrían a cargo animar los Ejercicios Espirituales que por entonces también promovía el Santo Cura Brochero, con quien trabajó de la mano.
La comunidad se funda en 1872 con el nombre de Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús, siendo la primera congregación apostólica femenina de Argentina. Fallece el 5 de abril de 1896.
Ver también:
«La historia de una buena mujer»: Libro sobre la próxima beata argentina Madre Catalina
Con información de AICA.
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