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El retorno a las Misas públicas fue calificado por los Obispos como «un momento de gracia» para los creyentes.
Las Eucaristías públicas ya han regresado a Italia, aunque con restricciones. Foto: Thomas Robertson.
Roma (20/05/2020 23:14:31, Gaudium Press) Los católicos en Italia se regocijan por el retorno de las Misas públicas en el país. Sin embargo, persisten restricciones a otros Sacramentos y sacramentales. Las políticas aún en vigor limitan, sobre todo, el número de asistentes y evitan de la mayor forma posible el contacto físico con los presentes.
Mons. Gualterio Bassetti destacó el retorno de las Eucaristías públicas como «un evento importante» y «un «momento de gracia». Además recordó que los templos siempre permanecieron abiertos, aunque estaba restringida la celebración de la Eucaristía para los fieles. «Incluso si hemos experimentado nuestro ser Iglesia en la pequeña familia doméstica, donde hemos vivido muchos valores al estar cerca unos de otros», indicó, es tiempo de aprovechar la oportunidad de «volver a la gran familia».
Misas públicas y restricciones
Sin embargo, el retorno a la «gran familia» se realizará en grupos pequeños. Los fieles deben mantener una distancia de un metro de separación, vestir mascarillas y evitar el contacto en el momento de la paz. Los protocolos también restringen la participación en bodas y bautismos. Los prelados han desaconsejado generalmente administrar el Bautismo por inmersión y han pedido a los sacerdotes vestir guantes para ungir a los bautizados.
Otras restricciones locales incluyen evitar los bautismos simultáneos y emplear los días entre semana para su celebración. En el caso de los Matrimonios, se amplió el número de personas según el tamaño del templo, cuando se había limitado durante el aislamiento a únicamente los contrayentes. La disposición más notable es la necesidad de una nueva reunión del sacerdote con cada uno de los aspirantes para determinar si no han cambiado de opinión durante la espera.
Los funerales, que se realizaban únicamente con la familia inmediata y se habían ampliado a 15 personas presentes, podrán albergar fieles de acuerdo al tamaño del templo. Algunos Obispos han pedido programarlos en horas en que no hay otras Eucaristías.
En el caso de las Confesiones, las nuevas normas exigen que se realicen en espacios abiertos y ventilados de los templos. El sacerdote debe poder guardar cierta distancia del penitente, y al mismo tiempo debe garantizarse la privacidad. Por estos motivos, aún no se permite el uso de los confesionarios.
Con información de Crux.
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