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La Comisión Episcopal para la Educación y Cultura, ha emitido una nota en la que alerta sobre la tramitación de la ley LOMLOE.
Foto: Andrew Ebrahim por Unsplash.
Madrid (19/06/2020 12:02, Gaudium Press) La Conferencia Episcooal Española (CEE), desde la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura, ha emitido una nota en la que alerta sobre la tramitación en el Congreso de los diputados de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE).
El Gobierno de España, ha avanzado en la tramitación de esta reforma sin consenso parlamentario aprovechando el periodo de estado de alarma decretado por la pandemia del Covid-19. Con ella se estaría eliminando el criterio de “demanda social”, dando vía libre para que la Administración educativa distribuya las plazas de los alumnos en los centros educativos, ignorando la libertad de elegir de los padres.
La Iglesia en el debate público
Sobre esta ley, la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura, señala en la nota:
“El Proyecto de Ley de Educación -de la LOMLOE-, que ha sido publicado en circunstancias extraordinarias como las de un ‘estado de alarma’, afecta sin duda a toda la sociedad, verdadera protagonista de la educación, de la que formamos parte como Iglesia católica. Por ello, consideramos responsabilidad nuestra participar en el debate público en orden a su tramitación”.
Proteger la libertad de enseñanza
En este sentido, la comisión, tras examinar con atención el proyecto, insiste “en la necesidad de proteger y promover el derecho a la educación y la libertad de enseñanza, tal como se explicitan en la Constitución y en su interpretación jurisprudencial”.
Expresa su preocupación que la nueva ley limite el derecho de los padres en la educación de los hijos, por eso alertan: “Si el Estado tiene una tarea principal en la defensa y la promoción del bien de la educación para todos, no es sin embargo el sujeto del derecho educativo”.
Recuerdan también el principio de la formación integral recogido en la Constitución, por eso señalan: “no puede excluirse del ámbito escolar la educación de la dimensión moral y religiosa de la persona”.
La asignatura de religión
Es en este contexto donde se sitúa la asignatura de Religión. Por tal motivo la Comisión insiste en que la asignatura “no puede plantearse de manera ajena a la identidad cultural, moral y religiosa de la persona”.
“La persona, además, no existe nunca como individuo aislado, sino como miembro de un pueblo, partícipe de una cultura, de una tradición. La cual, en caso de nuestra sociedad, como en los diferentes países europeos, no se entenderían sin conocer y comprender la fe cristiana”, agregan, para luego afirmar que “la asignatura de Religión católica es una respuesta a estas exigencias”.
Concluyen, afirmando que la presencia del pueblo católico en la sociedad española es grande, por lo cual desean “que siga siendo una riqueza de nuestra sociedad, que posibilite el crecimiento, la libertad y la pluralidad de la propuesta educativa y, sobre todo, que sirva así al bien de los alumnos, las familias y toda la sociedad”.
Ver también:
Asignatura de Religión: 35.000 nuevos alumnos en España.
Con información de Archidiócesis de Conferencia Episcopal Española.
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