Menú 
Nombrado como capellán de la Guardia Suiza a finales de agosto pasado, el padre Kolumban Reichlin compartió parte de su experiencia recogida hasta ahora.
Redacción (05/11/2021 13:58, Gaudium Press) Oficialmente investido en sus funciones el pasado 16 de octubre, se espera que el padre Kolumban siga siendo capellán de la Guardia Suiza durante los próximos 5 años.
Originario del cantón suizo de Schwyz, el nuevo capellán de la Guardia Suiza se incorporó al monasterio de Einsiedeln en 1991. Estudió teología en los Estados Unidos y fue ordenado sacerdote en 1997 en Einsiedeln. En el monasterio, era responsable, entre otras cosas, de las peregrinaciones.
El P. Kolumban reconoce que es nuevo en el papel, pero dice que hay un buen ambiente, como una gran familia.
Como capellán, es responsable de la educación religiosa de los guardias y eventualmente de sus familias, además de todo el apoyo religioso: misas, sacramentos, etc.
Sobre las familias de la Guardia Suiza, el sacerdote explicó que está a cargo de la pastoral de 22 familias de esta institución. Por tanto, le corresponde a él enseñar catecismo, bautizar a los niños, administrar los sacramentos.
Las conversaciones personales con los soldados son también un hábito diario del capellán. “Es costumbre los fines de semana, cuando hay menos gente, que el capellán vaya a los puestos y hable con los guardias. Si están de pie o sentados en cualquier lugar, solos durante horas, es un buen momento para hablar. Para escuchar lo que están pensando, sus planes”, explicó el sacerdote.
El Capellán también debe organizar actividades culturales, así como peregrinaciones a Asís, Loreto o las peregrinaciones anuales a Tierra Santa y Lourdes.
El P. Kolumban explicó que, en general, las peregrinaciones se realizan en tres grupos diferentes para que siempre haya personal disponible. Esas peregrinaciones son ocasión muy propicia para que las personas se conozcan mejor a través de la socialización y las conversaciones.
El padre Kolumban planea visitar los dicasterios del Vaticano con la Guardia Suiza para que puedan tener una visión más profunda del trabajo de la Iglesia. (FM)
Con información de Catho.ch
Deje su Comentario