Menú 
La Vigilia por la Vida previa a la March for Life fue también multitudinaria.
Foto: Librería del Congreso de los EE.UU.
Redacción (20/01/2023 12:06, Gaudium Press) Desde hace tiempo la Conferencia de Obispos Católicos de los EE.UU. (USCCB) está de lleno acompañando la lucha provida, algo que quedó una vez más sellado en la Vigilia de oración por la vida que tuvo lugar anoche en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington, previa a la gran March for Life de hoy.
Como anunciaba ayer Gaudium Press la Vigilia abrió con la misa presidida por Mons. Michael F. Burbidge, presidente del comité de actividades provida de la Conferencia Episcopal americana, quien dijo que ahora no es solo la lucha por cambiar las leyes, sino también por “cambiar los corazones con una fe firme en la gracia y el poder de Dios”. Eso de la primacía de la gracia, repetido a una feligresía que no solo ocupaba los 9.000 lugares del gran Santuario, sino que también incluía a muchos de pie.
Recordó el Obispo de Arlington que “por primera vez en los 49 años de historia de la Marcha por la Vida, podemos decir que Roe vs. Wade [ndr. fallo de la Suprema Corte que en 1973 abrió la puerta del aborto en los EE.UU], una plaga para nuestra nación, nuestro sistema de justicia y nuestra cultura no existe más”. Aplausos calurosos de los asistentes.
Después de recordar a los luchadores provida del país, y de invitar a que “nuestros esfuerzos por defender la vida deben ser tan incansables como siempre”, Mons. Burbidge dijo que había que dirigir la atención ahora a las “comunidades locales”, donde se abrirán posibilidades por ejemplo de “limitar el alcance del aborto legalizado, frenar su financiación, o idealmente prohibirlo por completo”.
Biden, el ‘católico’ Biden
No ahorró el prelado alusiones hacia políticos del talante del presidente Biden y la antigua Speaker Pelosi, diciendo que “la caridad exige pedido de rendición de cuentas”, particularmente hacia aquellos que “en cargos públicos respaldan políticas que protegen o aumentan el mal del aborto”. Estos “deben saber que son responsables. Sí, al público al que sirven, pero sobre todo a Dios todopoderoso, fuente de toda vida”. Añadió que “esto es especialmente cierto para aquellos que profesan nuestra fe y tienen la mayor oportunidad de proteger al niño en el seno materno”.
También como estaba previsto, la Vigilia concluyó con la misa celebrada por Mons. Joseph Coffey, obispo auxiliar castrense.
Con información de National Catholic Register
Deje su Comentario